Hola de nuevo! Como sabes, ya estoy oficialmente de vuelta de Eslovenia y Zagreb, así que, mientras me pongo al día y os cuento más detalladamente todos los pormenores sobre el viaje, qué ver/comer/hacer etc., os cuento las 12 cosas que he aprendido en mi viaje por Eslovenia.
1. Siempre es un buen momento para disfrutar de un buen vino
A los eslovenos les fascina disfrutar de las conversaciones y el buen vino casi tanto como a nosotros. Supongo que me esperaba un carácter mucho más eslavo, más secos, pero me equivocaba de pleno.
A ver, que no son sevillanos tampoco, pero siempre encuentran un momento para relajarse y disfrutar de una terraza, una buena conversación y un buen vino.
2. Eslovenia es el lugar perfecto para viajar «slow»
Si todavía no lo conoces, el movimiento Slow defiende que los sitios hay que conocerlos poco a poco, sin prisas, sin carreras para cubrir una lista de «imprescindibles» y saltar a otro lugar.
Y Eslovenia es el lugar perfecto para poder hacer esto sin tener que llamar a Mudanzas Organero. Es un país relativamente pequeño (Galicia es un 30% más grande que Eslovenia – según Wikipedia – ), por lo que casi todos los sitios de interés están a menos de 2 horas de coche. Y aunque las «principales atracciones turísticas» están separadas unas de otras, la lista unánime es bastante pequeña (Piran, Ljubljana, Bled, Predjama y Postojna, Bohinj, Triglav, Maribor), por lo que puedes escoger qué visitar sin agobios o hacerte tu propia lista.
3. La gente ya alquilaba habitaciones antes de Airbnb
Mi madre siempre me dice que no nos hemos inventado nada con Airbnb, que ellas ya viajaban así mucho antes de los móviles o de Internet. Pero nunca lo había visto tan claro como en Eslovenia y Croacia.
En casi cada pueblecillo escondido te puedes encontrar el cartel de SOBE: habitaciones privadas, apartamentos y casas de huéspedes que sobreviven fuera de booking y Airbnb pero que están reguladas y controladas por las autoridades turísticas. Puedes llegar y probar a ver si tienes suerte o reservar a través de la página de turismo de Eslovenia.

4. Los dragones existen
(y George R.R. Martin probablemente se pasó una temporada por aquí)
Cuando hablas de Juego de Tronos, parece que todo se concentra en dónde grabaron la serie, pero para los que nos hemos engullido los libros, siempre es curioso ver cómo algunas de las cosas que imaginó George R.R. Martin están sacadas de la historia de algunos países.
Además de los dragones, hay muchas cosas que recuerdan a juego de Tronos, la fortaleza de Predjama, por ejemplo, construida en una cueva, o la cárcel al aire libre del castillo de Liubliana. Sin hablar de los bosques, la gastronomía o las historias locales.
Y sí, los dragones existen y son una especie rara de salamandra sin ojos que no alcanza los 30 centímetros de largo y que vive en las cuevas cársticas. Tiene un color rosáceo claro y muchos nombres: proteus, olm, «pez humano» o bebé dragón. Lo más curioso de todo es que pueden llegar a vivir 100 años pero sólo se reproducen cada 12 años o así y con muy malas cifras de natalidad (de 57 huevos puede que solo nazcan 3). Y este año están naciendo nuevos «olmitos» en las cuevas de Postojna, así que es un buen momento para hacerles una visita.
5. Hay ciudades que se viven y ciudades en las que se vive
No sé si tiene mucho sentido así escrito, pero cuando pisas Liubliana (270.000 habitantes, igual que Gijón) te das cuenta de que esta ciudad no se sufre, se disfruta. Quizás porque todo está relativamente cerca o porque las únicas cuestas son las que suben al castillo, pero aquí la gente disfruta de las terrazas, se mueve en bicicleta y es muy raro ver a alguien correr de un lado a otro.
Ya publicaré un par de artículos más sobre Liubliana, pero si te digo que también tiene una importante escena underground, que no se quedan cortos en actividades culturales y que tienen la principal universidad del país, te vas haciendo una idea.
Actualización 2021: Liubliana y los edificios de su centro histórico han entrado en la lista de Patrimonio de la Humanidad por su diseño centrado en las personas!!! Se unen así a otras maravillas como los hayedos primitivos y las cuevas del valle de Soca en la parte de naturaleza y las minas de mercurio en la parte cultural.

6. Hay ríos termales (no ríos al lado de aguas termales)
Cuando alguien me propone ir a una playa fluvial o a nadar a un lago por mi cabeza pasan dos cosas: a) un agua helada o cuando menos «fresquita» y b) Jack Wade pescando siluros de metro y medio. Nada demasiado apetecible.
Peeero, en Eslovenia hay ríos cuyas aguas alcanzan los 30 grados centígrados en verano (como el río Kolpa o Kupa). Y lagos en los que las fuentes termales caldean el agua (como el lago Bled, con una temperatura media de 12º pero que alcanza los 26º en verano).
Ojo, que hay ríos más fríos y muchas fuentes de agua fresquita por todas partes, gracias a los Alpes Julianos.
7. Hay paisajes que no necesitan filtros, ni ediciones, ni correcciones de luz
En Internet hay mucha gente que está a totalmente en contra de retocar las fotos, otros no publican una foto en Instagram sin haberle pasado antes uno o dos filtros. Yo, la verdad suelo retocar algo la luz cuando el día estaba oscuro y poco más. Pero revisando el «carrete» de estas dos semanas, prácticamente no he encontrado ninguna foto que necesite un ajuste.
Y no, no me he vuelto mejor fotógrafa de repente…

8. España está totalmente atrasada en el dominio de idiomas (más concretamente, del inglés)
Más allá del «Relaxing cup o café con leche in Plaza Mayor» de Ana Botella, los progresos de nuestro país en el aprendizaje de idiomas (líder en turismo a nivel mundial) dan vergüenza.
Y no lo digo porque sí: cuando hasta los taxistas islandeses me hablaban en perfecto inglés, pensé «son nórdicos, son diferentes»; pero que hasta en la zona menos turísticamente explotada de Eslovenia (Bela Krajina, una maravilla que merece la pena descubrir), hubiese siempre alguien que hablase inglés, e incluso italiano o alemán en casi todos los sitios en los que entramos, ya no es tan «diferente».
9. Hacer camping puede ser cómodo, tranquilo y relajante, incluso como para una urbanita como yo
Vale, yo no me fui de camping, me fui de «glamping» a Big Berry, a la orilla del río Kolpa y en la frontera con Croacia. Ya os contaré más de la experiencia, pero en una minicasa con todas las comodidades, rodeados de naturaleza y con tan sólo otros 12 vecinos en todo el «camping», he vuelto nueva.
*glamping = camping + glamour
*minicasa = casa de menos de 40 m2 totalmente equipadas

10. El mismo plato puede ser entrante, principal o postre
Me queda mucho por descubrir de la gastronomía eslava, pero, desde ya, uno de mis platos favoritos es el Strukli. Los croatas dicen que el plato es suyo, los eslovenos se lo discuten, a mí me da lo mismo. Una especie de lasaña o rollo relleno de queso (y otras cosas) que puede ser salado o dulce, gratinado o cocido, y con muchos tipos de relleno.
¿El que más me gustó? De avellanas
11. Que el vuelo sea comparativamente más caro que a cualquiera de los países del entorno no hace que el país sea más caro
Ya os conté que no es fácil encontrar vuelos más o menos baratos a Eslovenia. Sin embargo, viajar a Eslovenia no te va a destrozar el presupuesto. Al no estar todavía en el top de países europeos, los precios están adecuados al nivel de vida de los mismos eslovenos, que es ligeramente más bajo que el nuestro.
Un dato para que te hagas una idea: un menú mediano de McDonalds cuesta 4.5€ pero, por favor, no vayas a McDonalds, tienes muchas opciones mejores.
12. La literatura eslovena es un gran desconocido (y no debería)
Intenté encontrar literatura eslovena en Español sin grandes resultados antes de irme de viaje. Es una pena, porque tienen grandísimos escritores y son lectores apasionados. Así que me he venido con una lista de títulos imprescindibles que sí están disponibles en inglés.
No entiendo muy bien por qué no se ha hecho foco nunca en la literatura de esta zona de Europa, sobre todo teniendo en cuenta que el día nacional del país gira en torno a Preseren, un poeta romántico que encontrarás en la principal plaza de Liubliana, y cuyo poema «un brindis» es el himno actual del país.

…Como ves, hay muchas razones por las que viajar a Eslovenia. Hay quien la incluye en un viaje largo a Venecia (están enfrente) o como entrada a los Balcanes. Para otros, es tan sólo un país de paso. No te equivoques, Eslovenia merece la pena por sí sola.
8 Comentarios y Preguntas
Hola, estoy pensando en hacer Eslovenia también en tren (me encanta el tren). Pero también quería hacer días de senderismo (nada complicado). Como lo viste para hacerlo por mi cuenta? El tema de los osos me da bastante cosa. Gracias!
Hola Alexandra,
Se puede viajar muy bien por libre en Eslovenia, además de que a los eslovenos les encanta el aire libre y tienen unas rutas de senderismo fantásticas. Pero para lo de los osos mejor contacta con la asociación alpina (https://en.pzs.si/), hablan inglés y te pueden dar info actualizada sobre como están los senderos y qué ruta es más asequible para viajar sola.
Que sepas que me estás dando mucha envidia desde ya.
Saludos y buen viaje!
Hola Leticia!! ecxcelente tu post, muchas gracias por la informacion!!!
Voy con una amiga a Croacia y Eslovenia por el mes de Septiembre., y deseamos hacer Eslovenia en tren, tienes una ruta que nos colabore para optimizar costos, tiempos y recorridos? la idea es 3 o 4 dias. Muchas gracias!!! Abrazo
Hola Malú,
No tengo ninguna ruta óptima en tren. El problema de Eslovenia es que todas las vias pasan por la capital, así que las opciones clásicas son ir de izquierda a derecha (o viceversa) o hacer base en Liubliana e ir saltando de un sitio en sitio según os interese.
Ya lo siento.
Saludos y buen viaje!
En realidad buscaba información sobre mi origen y el resultado me llevo a esta página exelente servicio gracias namasté escribo desde donde resido Venezuela country
Hola Johana,
Me alegro mucho de que te haya gustado. Es un país maravilloso. Namasté
Hola Andres!
No deberías tener mucho problema. Aunque es más fácil moverse en inglés, muchos eslovenos entienden italiano y les será fácil entender también el catalán o el castellano. Y si no lo entienden, lo intentan.
También hay mucho erasmus estudiando y trabajando allí que habla castellano y suele haber audioguías y visitas en castellano en la mayoría de los sitios. Creo que lo más difícil es pronunciar correctamente los nombres de los sitios (Portorož se pronuncia algo así como portorox), pero con llevarlo escrito seguro que lo solucionas y, además, es una buena forma de empezar una conversación :D
Espero que te animes a visitarlo, es un país fantástico!
hola;me llamo andres,yo solo hablo castellano y catalan y mi preguta es si me puedo perder por ese pais unos 7 o 10 dias sin problemas, me encanta todo lo que leido y visto de ese pais, gracias y un saludo.